Este pasado sábado noche tuvimos nuestra primera actuación como dúo, amenizando la maravillosa velada que fue la boda de Daniel y Cristina, amigos íntimos de un buen amigo nuestro.
Tras un casamiento de sábado tarde, los invitados comenzaron a asistir al hotel Zerbinetta. Un encantador emplazamiento situado en lo más alto de Dilar, ubicado en plena naturaleza y excelente mirador tanto de Sierra Nevada, como de la ciudad de Granada, la cual se dejó ver más tarde como si de una masificada constelación se tratase.
Antes de pasar al salón, la copa de bienvenida se llevó a cabo en los jardines del hotel, bajo unas escaleras rusticas que hacían de alfombra roja e iban acercando a los invitados al nuevo lugar de reunión en el que no faltaron los reencuentros, los gestos de afecto, las fotografías. Tampoco faltó el buen comer y el buen beber de una celebración que solo acababa de comenzar.
Al caer la noche, las escaleras mencionadas antes se iluminaron y delimitaron el perímetro ajardinado del recinto con la magia típica de los momentos inolvidables y fue cuando los invitados comenzaron a ocupar su lugar en el salón, siendo los últimos los novios, quienes accedieron felices y despacio mientras acompañados por nuestra música captaban la atención de los allí presentes.
La cena transcurrió al igual que la copa de bienvenida de manera exquisita por parte del servicio del hotel y no menos agradable por parte de los familiares y amigos que acompañaron a Daniel y Cristina en un día tan importante para ellos.
Tras la comida, se sucedieron los regalos y más reencuentros, pero el momento culminante el cual daría paso además a nuestra actuación, no llegó hasta que Daniel y Cristina inauguraron el baile con un tema de Barry White a petición de la novia.
La agradable velada previa a la actuación se alargó hasta las una y media de la madrugada, hecho que sin duda garantiza lo a gusto que se encontraba todo el mundo en aquel lugar y en aquel momento. Pero tras Barry White la actuación del dúo comenzó e iluminó la pista de baile de un modo más tímido primero con temas de Adamo, Aznavour, Francisco Céspedes, etc. y poco más tarde se sucedieron pasodobles, rancheras, cumbias, rumbas, sevillanas, etc.
La actuación como dúo musical fue breve, ya que se comenzó algo más tarde de lo esperado y aunque la noche fue inolvidable, no era eterna y mucha gente tendría que marcharse en pocas horas y el hotel mismo sugirió la clausura de la velada a las cuatro y media, motivos los cuales nos obligaron a dejar de cantar más pronto de lo que habríamos querido y comenzar la sesión de deejay más pronto de lo esperado, momento este último el cual fue el más animado de toda la actuación, ya que la mayoría de los invitados se animaron a bailar al ritmo de los temas propuestos y mezclados por un dúo transformado ahora en pinchadiscos.
El momento deejay que duraría poco más de hora y media fue sin duda la traca final de una boda inolvidable, la cual compartió fecha además con el esperado y ansiado ascenso a primera división del Granada C.F., coincidiría también con la primera actuación de los dos hermanos como dúo musical y todo ello acontecido en un lugar tan agradable, apacible y mágico como el hotel Zerbinetta.
Enhorabuena y muchas felicidades desde aquí para Daniel y Cristina.
